“No señor, no moleste. Este es un lugar de trabajo. ¡Respete!”
Fueron las palabras con las que Alma Lourdes, de 30 años de edad y madre de una niña, al parecer, defendía a su hermana de un hombre acosador y misógino, quien al no recibir un trato especial regresó a mat4rl4 a la carnicería donde trabajaba, en Cajeme, Ciudad Obregón, Sonora.